jueves, 15 de julio de 2010

¿Cómo se pueden resolver los problemas de la vida diaria?

Todos los seres humanos, sin excepción alguna, tenemos problemas, pero claro, todos varían en magnitud y dificultad. Desde el problema “¿Qué me voy a poner hoy?” hasta, mi “hermano tiene un problema de adicciones”, todos tenemos situaciones de vida en las cuales tenemos que poner en práctica nuestros valores, juicio, y conocimientos de vida para resolverlos.
Los problemas tienen distintas soluciones, claro, todas en base a nuestras experiencias y nuestros conocimientos, pero hay mejores soluciones que otras, y sobre todo, en base a que es lo que queremos. Algunas veces se solucionan los problemas en el corto plazo, sin pensar en las consecuencias futuras. Por ejemplo, si alguien necesita dinero para comprar medicinas, puede que solucione el problema robando dinero de la bolsa de alguien, solucionando inmediatamente la necesidad de salud, pero sin ponerse a pensar en las consecuencias que esto le puede conllevar, como denuncias, encarcelamiento y persecución.
Y tampoco se tienen que enfrentar los problemas solos, siempre hay alguien dispuesto a ayudarnos o con la experiencia necesaria para orientarnos. Hay que saber quienes son estas personas y como pueden apoyarnos para poder salir adelante en nuestra vida.

Me gustaría que relataran un conflicto que hayan tenido tomando en cuenta:
¿Qué los llevó ahí?
¿Cómo se sintieron?
¿Qué hicieron?
¿Hubo alguien que los apoyara?
¿Cómo lo solucionaron? ¿Fue la mejor forma?
¿Qué consecuencias tuvieron?

Y recuerden: "Las tormentas hacen que los árboles tengan raíces más profundas."

Img obtenida de: Jeopopolis

1 comentario:

  1. Yo tuve recientemente un problema con un profesor de la escuela el cual me sacó durante un examen por estar copiado. Reprobé el examen y me fui a extraordinario el cual no pasé. Ahora tengo que cursar de nueva cuenta la materia, la situación, es que por enojo le rompí uno de los vidrios del carro. Me sirvió para desahogarme, pero me cacharon y ahora no puedo regresar a esa escuela. Creo que no hice lo mejor, me enojé y me entristezí dejandome llevar, pero ya más calmado y platicándolo con mis papás, me cambiiaron de escuela. Creo que ahora le voy a echar más ganas a la escuela y no dejarme llevar por mis impulsos.

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